Las personas que tienen algún tipo de dificultad para caminar o mantenerse de pie, utilizan las muletas para poder apoyarse. Estas pueden ser de diferentes tipos según la necesidad que se tenga. Con una muleta se puede obtener estabilidad, seguridad y una mayor movilidad.
Las muletas suelen compararse con el uso de bastones, pero las muletas son más estables. Estas deben usarse si el paciente tiene alguna lesión puntual o si requiere más apoyo del que un bastón puede brindarle. Las muletas permiten que el cuerpo no cargue todo el peso de ambas piernas o de una sola.
Clases de muletas
Existen diferentes tipos de muletas que, según la lesión o la necesidad, se pueden utilizar para que el paciente pueda tener una mejor movilidad o desplazamiento.
Bastón Ingles
Se trata de un tipo de muleta ortopédica que se recomienda para personas que sufren una lesión temporal pero también para uso prolongado. El bastón ingles tambien llamado, muleta de antebrazo, tiene un apoyo en el antebrazo, lo que permite un correcto soporte, diseñado con un plástico rígido. De esta manera se evita la formación de úlceras y roces de la piel. La empuñadura para sostenerla es de un material fuerte y al mismo tiempo diseñada para ser cómoda.
Es importante tener una buena musculatura del brazo para que el balance al trasladarse sea el correcto. Es también importante un torso fuerte. Por lo tanto, no es una muleta apta para todos.
Bastón cuadrípode o trípode
Para las personas que presentan una gran dificultad para mantenerse de pie o estable, esta opción de cuadrípode o trípode son ideales para ellos. Estas, como su nombre lo indica, pueden tener cuatro o tres pies de apoyo. Son igual a la muleta anterior, debido a que cuentan con la abrazadera para el antebrazo, empuñadura y caña regulable.
La única dificultad de esta clase de muletas es su tamaño, debido a que para moverlas no es tan sencillo. Por ejemplo, para subir una escalera. Lo mismo ocurre con su transporte, en caso de que sea necesario llevarla de una casa a otra.
Muletas plegables
Son muletas muy cómodas y prácticas, al igual que son perfectas para ser un apoyo ideal para personas de avanzada edad. Estas pueden plegarse para poder transportarlas de un lugar a otro con mayor facilidad. Sin duda, es una clase de muleta perfecta para muchos casos.
Muletas axilares
El soporte de esta clase de muleta va directamente en las axilas y en las manos, permitiendo una correcta distribución del peso corporal. Normalmente, aunque se sitúe en la axila, cuentan con una almohadilla que la hace ser confortable y evitar que al usarla se ocasione algún daño. También tienen una almohadilla para la zona donde se colocan las manos.
Esta muleta, según la lesión o movilidad, se puede usar una sola o dos al mismo tiempo. Cuando se usa una en cada brazo, permite mayor movilidad y facilidad en el desplazamiento. Pero si, por ejemplo, la lesión impide que se pueda usar o tocar el piso con el pie o pierna, es necesario usar dos.
Apoyo codo y antebrazo
Hay tambien muletas que permiten que se apoye el codo y el antebrazo. Habitualmente, están indicadas para personas que sufren de alguna debilidad en la mano, el codo (poliartritis).
Al momento de elegir una muleta, es importante que esta se ajuste a las necesidades del de cada persona. Por supuesto, siempre es importante que un experto determine cuál es la mejor para cada caso en especial.